hasta el otoño de que vuelva lo mismo de siempre

que no me van vuestro rollo sectario, vuestros inconformismos de moda, que Sabina sea lo más, que el yoga pueda salvarnos absolutamente de todo, que la soja vaya a apartarnos de la muerte y las multinacionales, cuando son hectáreas de bosque las que mueren para plantarla, que los poetas que más venden se metan en política y muevan manadas de borregos contra otras manadas de borregos que vocean consignas que parecen diferentes pero al final son las mismas, que no me vale vuestra rebeldía calva, que no tiene pelos a los que agarrarse cuando la verdadera desesperación os pilla con la mente sentada en una mecedora para ancianos, que vuestra sangre se aburre de dar siempre la misma vuelta y no ver la luz, que incluso aquellos que fingen que piensan como vosotros porque tienen miedo de estar solos saben que esto es un aburrimiento institucionalizado. que voy a empezar el otoño diciendo lo que pienso. y lo que pienso es que no, que no, que no quiero hacer las cosas porque tienen gran aceptación social. y no, no me déis por sentado, dejadme ser unos metros más allá.