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"¿No hay que cambiarlo el mundo? La virtud, pues, es peor que inútil: es también un vicio. Si se necesita ser particularmente bueno es que algo va francamente mal. Maldita la época -sí- que necesita héroes y santos. No se puede transformar el mundo con la varita de masturbar nuestras virtudes: hay que derribar la Bastilla."
Santiago Alba Rico.

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16.9.10

estimada amiga culointacto...

... la ausencia de dolor no es alegría, la falta de reacción a los estímulos no es equilibrio auténtico, la inmovilidad absoluta no es sinónimo de crecimiento, tener relaciones con personas altamente inferiores a ti levanta sospecha de incapacidad para enfrentarte a algo mayor que tú misma. no me has dado nada que no pudiera darme cualquier desconocido por la calle. has sido una bonita fuente de una suave y lenta innaturalidad insípida que se convirtió en aburrimiento o ausencia.
quiero que me devuelvan mi tiempo y todas las veces que me equivoqué pensando que era una suerte tenerte cerca. suerte la tuya, que no hablabas con nadie con sangre en las venas desde hacía lustros. fue mi capacidad de optimismo el que vió algo mejor en ti. porque tú no vives, tú ignoras a los animales interiores para pasar a apaciguar a las piedras.

1 comentario:

Stalker dijo...

"porque tú no vives, tú ignoras a los animales interiores para pasar a apaciguar a las piedras".

Intenso, Apneica, y surge de la herida, del desconcierto, de la entraña expuesta y la carne-grito-vivo.

Entiendo tan bien tus palabras...

Hay una canción de Lhasa que habla de algo parecido: "El Desierto":

"...que el desierto es más tierno y la espina besa mejor"

abrazo

"¡Por un fusible y un rotor! Es una advertencia al lector: las cosas van mal, pero irán peor. Digan lo que digan, éstos gripan mejor que Reagan. La humanidad no para de avanzar: primero vino Felipe y ahora tenemos a Aznar. ¿Por qué no me dejan participar? ¡Por un cable y un pistón! ¡No acepto la jubilación! ¿Por qué no me dan un nombramiento? Volveré, lo garantizo, y globalizaré hasta el granizo. jajajajaja. ¡Qué mala, pero qué mala soy!

Prólogo de la Bruja Avería en El Libro de la Bola de Cristal,
por Santiago Alba Rico.